ENFERMEDAD
ALVEOLITIS DENTAL (POSQUIRÚRGICA)
El dolor y la hinchazón son normales después de la cirugía oral y son proporcionales al grado de manipulación o de traumatismo.Si la inflamación no empieza a desaparecer al tercer día del posoperatorio o la extracción, es probable que exista una infección y deba administrarse un antibiótico (p.ej., penicilina 500 mg cada 6 h hasta 72 horas después de la desaparición de los síntomas).
Se supone que debido a la acción bacteriana es mucho más común entre los fumadores y las usuarias de anticonceptivos orales. También es habitual en la extracción de los molares mandibulares.
La osteonecrosis de la mandíbula es una lesión oral con una exposición persistente del hueso mandibular o maxilar, que generalmente se manifiesta con dolor, aflojamiento dental y secreción purulenta.
La osteonecrosis puede darse después de la extracción de un diente, pero también puede aparecer tras un traumatismo o la radioterapia en la cabeza y el cuello. Recientemente, se ha descubierto una asociación con el uso de bisfosfonatos. Es poco probable que la suspensión del tratamiento oral con bisfosfonatos reduzca la tasa de osteonecrosis mandibular.
SÍNTOMAS
ALVEOLITIS DENTAL (POSQUIRÚRGICA)
El dolor dental
tras extracción del diente puede ser de moderado a intenso y se trata con analgésicos. La alveolitis post-extracción
provoca dolor debido al hueso desnudo o por la pérdida del coágulo del
lecho alveolar. Normalmente, el
dolor dental aparece en el segundo o tercer día del
postoperatorio, o se irradia hacia la oreja y puede durar de unos
pocos días a varias semanas.
Generalmente, el sangrado de los dientes tras la extracción dental se produce en los pequeños vasos hasta que se tamponan por
el coágulo. Hay que tener en cuenta que unas gotas de sangre diluidas en una boca llena de
saliva aparece como un sangrado mayor de lo que es realmente.
Los pacientes que toman anticoagulantes a dosis bajas, aspirina deberían suspender el tratamiento de 4 a cinco días antes de la cirugía
oral, ya que el sangrado puede ser muy importante.
DIAGNÓSTICO
ALVEOLITIS DENTAL (POSQUIRÚRGICA)
La osteomielitis maxilar se confunde con la alveolitis
y se distingue por la fiebre, la sensibilidad local y la inflamación.
Si los síntomas duran más de un mes, puede aparecer un
secuestro, que es un diagnóstico de osteomielitis, y debe
buscarse precozmente mediante radiografía.
TRATAMIENTO
ALVEOLITIS DENTAL (POSQUIRÚRGICA)
La osteomielitis exige tratamiento prolongado con antibióticos eficaces contra microrganismos tanto grampositivos como gramnegativos y si hay necrosis ósea, su extracción.
La medida preventiva más eficaz es el mantenimiento de una buena higiene oral antes de cualquier intervención dental.
La necrosis del maxilar es difícil de tratar y normalmente implica el desbridamiento limitado, antibióticos y enjuagues bucales.
Si el sangrado persiste, puede anestesiarse la zona mediante bloqueo nervioso o infiltración local con lidocaína al 2% que contenga 1:100.000 de epinefrina. Entonces, se realiza un legrado del lecho para eliminar el coágulo existente, refrescando el hueso, y se irriga con solución salina isotónica.
A continuación, la zona se sutura bajo tensión suave. Antes de suturar, pueden aplicarse en el lecho agentes hemostáticos locales, como trombina tópica sobre una esponja de gelatina o de colágeno.
La alveolitis se trata con analgésicos tópicos (torunda de yodo o lidocaína al 2,5% o tetracaína al 0,5%), en el lecho dentario. La gasa se cambia cada 1 a 3 días hasta que los síntomas remiten. Este procedimiento elimina la necesidad de analgésicos sistémicos.