La vasculitis sistémica se diagnostica mediante:
Evaluación clínica
Pruebas de anticuerpos antineutrofílicos citoplasmáticos
Biopsia
Angiografía
Se sospecha por:
Características de los síntomas o signos de vasculitis.
Manifestaciones isquémicas (p. ej., accidente
cerebrovascular isquémico, claudicación de las extremidades, isquemia
mesentérica) y factores de riesgo como la ateroesclerosis.
Combinaciones inexplicables de síntomas en más de un sistema
orgánico que son compatibles con vasculitis (p. ej., hipertensión arterial,
mialgias), especialmente cuando están presentes los síntomas de una enfermedad
sistémica.